miércoles, 11 de mayo de 2011

UN DIA A LA VEZ

Antes de comenzar debo hacer de su conocimiento que en casa no hubo agua dos días, mi auto esta descompuesto y para colmo de males el fin de semana hubo un corto de electricidad en todo el pueblo. No quiero encontrármelos en este momento porque tal vez descargue todo mi enojo que desde luego no merecen. Sin embargo lo anterior me motivo a escribir lo siguiente que espero sea de su agrado.

Erase una vez… si cuando el ser humano caminaba libremente entre el monte y los animales sin mas preocupación que comer, defenderse y reproducirse. ¿A poco no debió ser una vida comoda? No había propiedad privada y mucho menos escuelas. (los estudiantes que lean esto deben decir ¡que chido¡) eran épocas en que todo se encontraba en la naturaleza, no era necesario trabajar (nuevamente deben decir ¡que chido¡)

En un principio todo estaba bien… hasta que un día uno de los hombres más hábiles, fuertes y sin duda con un poco mas de inteligencia se adueño de las cosas. Y desde entonces las cosas comenzaron a ponerse muy mal (en lugar de ¡que chido¡ deben decir: ¡que mala onda¡ ) ¿Cómo que cuales cosas? La cueva mas importante y todo lo que encontraba a su alrededor, piedras, madera, frutos, etc., adueñándose incluso de otros débiles hombres a quienes hizo trabajar, beneficiándose del producto del esfuerzo de otros. Así es como surgió la propiedad privada. Ese hombre dueño de cosas y vidas tuvo tiempo para observar el cielo y la naturaleza, descubrió ciclos que se repiten después de cierto periodo de tiempo, invento Dioses para cada cosa que lo rodeaba. Un Dios para la lluvia, otro para la caza, uno mas para el sol, etc., Dioses para todo. Ese hombre fuerte y rico, ahora era también sacerdote y explicando con la figura de los dioses muchas de sus actividades. Ofrendas y rituales fueron parte de la vida cotidiana. La vida de todos esos hombres se fue complicando cada vez mas.

Aquellos hombres poderosos extendieron sus dominios, utilizando en todo momento a sus súbditos y al conquistar otros reinos se apoderaron de mas tierras y mas hombres. Esos hombres ricos hicieron legal y legítimamente que sus territorios tuvieran límites, fijaron leyes para evitar que los plebeyos pudieran ascender de clases sociales. Los nobles crearon órganos de gobierno y control para su beneficio… y asi pasaron miles de años. Hasta que llegamos al siglo XIX.

Al llegar la revolución industrial, los comerciantes aprovechando la tecnología, se hicieron también ricos y poderosos; algunos desplazaron a los nobles. Sin embargo nobles y burgueses pudieron adueñarse de la tecnología. Producir mas rápido y con el menor costo posible fue la prioridad, aun a costa del desempleo que provocaron con al adopción de maquinas de vapor y electricidad para la industria y el campo. Solo los ricos y poderosos pudieron financiar nuevos inventos como los motores de combustión interna y los medios de comunicación. Controlaron economía y conciencias.

apesar de todo todo iba bien, sin embargo hasta la mitad del siglo anterior, la alimentación era mas natural, no había alteración genética en los productos, a pesar del uso de insecticidas, pesticidas y demás sustancias nocivas que se empleaban en el campo. Todo era mas natural. Aquellos que cuentan con mas de 30 años de edad estarán de acuerdo conmigo que ha cambiado radicalmente la forma de vida, porque ahora son mas fáciles tantas cosas. Pero también somos dependientes de las cosas. Vale la pena preguntarnos ¿En que momento nos hicimos esclavos de las cosas? No puedo tomar agua de la llave del patio porque me han hecho creer que es sucia y contaminada, igual sucede con el rio. No pude hacer nada en estos días porque no había electricidad y esta maquina en la que estoy escribiendo necesitaba corriente. Mi diversión se detuvo en un largo día aciago y para colmo de males el celular se descargo. Sin televisión o radio que nos permita comunicarnos con el exterior es un día difícil, pesado y para colmo aburrido. ¿o no estimado lector? Agregue usted que no tuve carro para salir de paseo.

En fin, el ser humano es tan dependiente de la electricidad, el agua potable y del automóvil, entre otras cosas; que cada vez nos sentimos más inútiles si no contamos con ellas. Lejos estamos de aquellos tiempos en que todo era bonito. Las necesidades eran menos porque la vida del hombre era mucho más sencilla.

Hoy vivimos dominados por el consumismo. Todo es negocio. Hemos creado fuentes de ingreso que solo en este país existen, limpiadores de zapatos, vendedores de mercancía ilegal, checadores de transporte publico, franeleros, etc., muchos de ellos para suplir deficiencias en la creación de empleo; de algo debe comer nuestra familia. El ser humano como especie, se ha complicado la existencia, yo soy parte de esa especie y también me siento responsable. Pero como evitarlo cuando todo te arrastra a esta forma de vida. Resistirse a ella significa ser rechazado o tildado de inadaptado social. En fin ahora puedes tener vida social o ser integrante de redes sociales; comunicarte con celular o estar incomunicado por no tenerlo; no puedo regresar a ser un hombre primitivo para cocinar con leña porque vivimos en un departamento, no puedo hacer muchas cosas; no puedo viajar en auto propio, debo depender del horario del transporte publico, en fin… tal vez lo peor es quedarse sin agua. ¡que mal plan! ¿verdad?

Pd. Todo esto es pasajero. Recupere mi auto, la comisión arreglo la luz y con ella pudimos bombear el agua. Sin embargo sigo dependiendo de los intereses de dueño del dinero que al igual que yo, domina a todos los que vivimos en lo que queda de este pais. Si tienen alguna propuesta para liberar mi conciencia, háganla llegar por este medio.